Sally Brown, los abanderados de Madrid

Hacía casi nueve meses que no veía en directo a los veteranos Sally Brown. Estos chicos ya llevan ocho años en la escena 2 Tone madrileña y cargan con dos largas duraciones a sus espaldas más un single que acaban de presentar en enero. Volver a escucharlos en la sala donde los conocí por primera vez (Wurlitzer Ballroom), me ha traído buenos recuerdos.

Sally Brown está llevando a cabo la gira “Yo soy de Madrid” para presentar su último trabajo, el single “Madrid/Boss Nass”, editado en flamante vinilo de siete pulgadas por RedStar 73, Rudy´s Back y la propia banda, bajo la producción de Don Fe, especialista en Dub y Reggae y que colabora con el Hammond en la cara B del single.

Después de haber tocado en Segovia el viernes, la noche del Sábado 21 se la dedicaban a su ciudad, este montón de cemento (mal puesto a veces), carreteras, atascos y contaminación que tanto gusta por sus bares y buenas gentes: Madrid.

Por la sala estaban las caras habituales, los incondicionales de la banda que se saben todas las letras y que no dejan de moverse durante todo el concierto. Saludos, charlas, cervezas… un reencuentro en toda regla en las puertas del local.

Después de una sesión de Dub a manos del productor Don Fe, los seis magníficos -vestidos de riguroso negro- subieron al escenario, decorado con una enorme pancarta de la bandera de la Comunidad de Madrid sobre la que aparece la cara de Esperanza Aguirre en blanco y negro y la leyenda “God save the queen” tapándole los ojos, al más puro estilo Sex Pistols. ¡Qué maravilla! Las camisetas con este diseño deben inundar las calles de Madrid.

Después de una intro instrumental muy llamativa, donde fusionaban ritmos sincopados con toques surferos y mucho saxofón a manos de Pérez, el espectáculo comenzó con “Joe Pesci”, tema con el que abre el segundo álbum de la banda (Mi palabra es la ley). Y a partir de este momento comenzó la “confusión”, la sucesión de canciones que no habíamos escuchado antes, que no conocíamos, pero que destacaban por una fusión que integraba toques propios del Funk y del Pop, dejando a un lado -relativamente- las bases sincopadas de guitarra y saxo.

Sin embargo, no faltaron ya sus temas clásicos, como “Sally Brown”, “Scooter” o “Corre, corre”; ni las versiones de “Enamorado de la muerte” o “One step beyond”, desatando los mejores momentos de baile que se vivieron durante el concierto.

La gira “Yo soy de Madrid” continúa hasta el próximo 28 de enero, siendo la siguiente parada en Santander, lugar de origen de la mejor banda de Reggae a nivel estatal: Smooth Beans.

No sé qué haréis vosotros ahora, pero yo voy a pinchar el single por su cara A mientras enchufo Youtube para ver el videoclip que han hecho para este tema (original de Salidas de Emergencia), que tanto tiempo estábamos esperando poder escucharlo en una grabación de estudio y cuidada. Y si no habéis visto el clip… ¿a qué estáis esperando?

Nacho Álvaro (A.K.A. Monkey Man)

Sally Brown en siete pulgadas

Sally Brown, la banda de 2 Tone madrileña, acaba de sacar su primera referencia en vinilo (Madrid/Boss Nass), siendo éste el tercer título de su discografía.

La cara A contiene la canción que lleva por título “Madrid”, un tema original de la banda Salidas de Emergencia, que pasa del ritmo de Punk propio del trío femenino, al estilo sincopado de los 2 Tone Kids. No es un tema desconocido para los que frecuentan los conciertos de Sally Brown, ya que solían incorporarlo en su repertorio; pero, sin duda, es un placer poder tener una grabación de estudio (y más si es en vinilo) de este himno rabioso, con tintes castizos y crítico.

Por su parte, la cara B guarda el tema dedicado a la criatura de Star Wars, Boss Nass, que aparece en la portada del disco destrozando algunos de los edificios más emblemáticos de Madrid, mientras que los componentes de la banda juegan el papel de superhéroes (o supervillanos, según se mire). Un tema 99% instrumental que también ha sonido en los últimos bolos, como en el que compartieron cartel con Mr. review, sin ir más lejos, el pasado mes de noviembre en la sala Caracol.

Dos nuevos temas en flamante vinilo producidos por Don Fe (reconocido productor británico de Dub y Reggae) y coeditados por RedStar 73, Rudy’s Back y la propia banda.

Nacho Álvaro.

Loquillo emociona a Madrid

Resucito el Blog después de un parón en el que se han juntado exámenes, vacaciones de verano, recuperaciones en septiembre y algo de dejadez, no nos vamos a engañar.

Monkey Sounds “renace” en una nueva temporada y empieza con buen pie, siguiendo la línea de las entradas anteriores: recogiendo las crónicas de los conciertos más destacados de la escena musical jamaiquina y española de los 80. Este comentario está dedicado al concierto que dio ayer la Estrella (con mayúscula) del Rock and Roll del panorama nacional: José María Sanz, Loquillo, perteneciente a la gira que está celebrando por toda la geografía nacional con motivo del 30 aniversario de su carrera.

Noche de R´n´R en Madrid, de frío, de amigos, de cerveza… de pura vida declarada. La Riviera acogía al barcelonés y allí se juntaron 2.500 fans del Loco, quedándose la sala pequeña. El éxito de asistencia fue tal, que las entradas se agotaron a falta de más de una semana de la fecha del concierto. Fuimos previsores comprando las entradas con un mes de adelanto.

Estábamos nerviosos, queríamos ver a la R´n´R Star sobre el escenario, desde la primera fila (que luego fue 2º fila, pero nos vio y le vimos bien). Los horarios se respetaron y el espectáculo comenzó a las 9 y cuarto, estando programado su inicio a las nueve en punto.

Loquillo al comienzo del concierto

Ya se iban calentando los motores cuando las luces se apagan, el público se calla por unos instantes y empieza a sonar el tango “Volver, voler”. Poco después comienza a aparecer la formación y, por último, Loquillo, enfundado en un traje negro con el logo del pájaro loco bordado en la parte izquierda de su americana.

“En las calles de Madrid” abre la noche y todos coreamos como si se tratara de nuestro himno este tema, alzando la bandera de la Comunidad de Madrid, que fue señalada por Loquillo en varias ocasiones. Una palabra define lo que sentimos en ese momento: orgullo.

Y a partir de este momento, un repertorio plagado de éxitos que el público quería escuchar y cantar con él como si se tratara el concierto de un karaoke gigante en el que el Loco hacía de pantalla donde se reflejan las letras. María, Pégate a mí, Memoria de jóvenes airados… todas las canciones que componían su play-list eran recibidas por el público, al principio, con gritos y ovaciones para pasar a ser voceadas por todos. Era impresionante el momento en el que sólo se escuchaban a las 2.500 voces que abarrotaron la sala. Y más increíble aun los gritos de los que estábamos allí gritando “Loco, Loco” hasta el punto en el que Loquillo no podía decir ni “mú” por los decibelios que estábamos produciendo desde el gallinero.

Jaime Urrutia y Loquillo durante "El hombre de negro"

La primera sorpresa que nos dio Loquillo (que recibimos a pesar de habérsela tenido que dar nosotros a él, ya que cumple años el mes que viene) fue la presentación de Jaime Urrutia para cantar con él la versión de Johnny Cash “El hombre de negro”. El Loco lo presentó diciendo antes que “Madrid le recuerda a las canciones de Gabinete Caligari”.

Llamó la atención el hecho de que Jaime utilizara un atril con la letra de la canción. Con una ovación espectacular, coreando su apellido como si la vida nos fuese en ello, despedimos a Urrutia, que estaba emocionado y apenas parecía querer bajar del escenario.

En la última parte del concierto, Loquillo, que desde el comienzo del bolo se servía copas de champán, hizo un brindis “por la amistad” y desde el fondo del escenario se podía intuir la silueta de Sabino Méndez, que fue recibido con gran entusiasmo por los asistentes. Y con su hacha se unió a Igor Paskual y a Jaime Stinus.

Con Sabino en el escenario, sonaron los éxitos de Loquillo: El ritmo del garaje, Rock and Roll star y La mataré. Fue este tema especialmente esperado, porque hacía una década que en los conciertos Loquillo no la había incluido. Las reacciones fueron inmediatas, por parte del público: sacar el móvil para grabar este momentazo, a pesar de los impedimentos que pusieron los encargados de seguridad a pie de escenario, llegando a tapar los objetivos de las cámaras.

Y como broche de oro a lo que había sido una genial noche de invierno, Loquillo se despidió de Madrid con su clásico y espectacular Cadillac Solitario, animando al público a que la cantase con él. De hecho, en la última estrofa de la canción, se quedó callado, gesticulando únicamente con sus manos y dejando que las 2.500 gargantas que había en la sala pusieran la voz a esta oración.

Es realmente emocionante ver al Loco a pie de escenario, a escasos palmos de distancia del público, de rodillas, con cara descompuesta y gritando a pleno pulmón “¡nena!” pareciendo que va a romper a llorar de un momento a otro.

Y tras una pausa, Loquillo y sus muchachos se juntaron para despedirse del público y vi que era la oportunidad para lanzarle la bandera de Madrid que había estado desplegando en las ovaciones y los momentos más importantes del concierto. El Loco, agradeciendo el gesto la recogió, la desplegó en el escenario mostrándola con orgullo a toda la sala y la firmó con la mejor de sus sonrisas. Ahora guardo ese banderín como oro en paño.

Loquillo muestra la bandera madrileña

 

Una noche perfecta en compañía de las figuras más grandes del R´n´R que hay en España. Gracias, Loquillo. Te esperamos pronto en Madrid.

Incluyo el video de «Cadillac Solitario», la despedida por todo lo alto del concierto ofrecido en Madrid el 26 de noviembre de 2010.

Nacho Monkey Man

Fotografías: Marta Martínez.